Hasta ahora en el mundo se ha identificado alrededor de 3.500 especies de cucarachas, sin embargo, es muy probable que existan muchas más. Su hábitat está localizado, en la gran mayoría de los casos, en las selvas tropicales y en los lugares donde existe mucha humedad y calor. Tienen una alta capacidad para sobrevivir en todos los ambientes, por ello el único lugar de la tierra en donde no se encuentran es en la Antártida. De toda esta gran variedad, sólo 10 especies están dentro del grupo de las consideradas plagas domésticas.
En muchas ocasiones nos preguntamos cómo han llegado a nuestra casa si estamos en un ambiente limpio. Pues bien, la respuesta no es muy alentadora, ya que a las cucarachas no les gusta vivir en lugares sucios, sino todo lo contrario. Aunque sus maneras de invadir nuestro hogar son innumerables, muchas veces pueden llegan volando.
Las cucarachas cuentan con seis patas (3 pares), que le permiten ser uno de los animales más ágiles en el mundo. De las diez especies de cucarachas domésticas, hay muchas de ellas que tienen alas, sin embargo la gran mayoría no pueden volar, sino que prefieren saltar ayudándose de sus alas para llegar desde sitios altos hasta el suelo.
Algunas de las especies de cucarachas que tienen alas y son capaces de planear, son las siguientes: Cucarachas Americanas, Cucarachas Asiáticas, Cucarachas Australianas y Cucaracha Verde. Todas estas pueden volar, aunque por la proporción entre tamaño y peso no le permiten ser unas voladoras expertas.
Precisamente, esta proporción entre tamaño y peso no les permite volar por mucho tiempo y las pueden colocar en una situación de desventaja, ya que pueden ser presa fácil para murciélagos y aves. Por tal motivo, prefieren contar con sus 3 pares de patas, de diferentes longitudes con espinas punzantes, que le permiten caminar por todo tipo de superficies.
A pesar de que las cucarachas tienen dos pares de alas, solo utilizan uno de los pares para volar. Un par de alas se encuentran en su parte delantera y, más que alas, son una cubierta protectora. El otro par de alas del tipo membrana fibrosa, lo tienen ubicado en la parte posterior. Cuando van a emprender el vuelo, utilizan los dos pares de alas para elevarse, luego mantienen las alas delanteras abiertas, mientras mueven las alas traseras para avanzar en el aire.
Finalmente, para responder la pregunta, podemos decir que no es tan fácil que encontremos una cucaracha volando en nuestras casas, en estos ambientes para ellas es más cómodo utilizar sus patas y correr silenciosamente, sin que los miembros del hogar ni siquiera se den cuenta. Sin embargo, si tienen que utilizar sus alas para llegar a lugares donde consideren que pueden extender su familia, sin duda lo van a hacer y dejarán sus huevos allí.